Son unas proteínas que se encuentran en las plaquetas y que se obtienen
por centrifugado de la sangre del propio paciente.
Estimulan la regeneración celular, aumentan la vascularización y producen
nuevo tejido. Cuando los concentramos conseguimos multiplicar su número
y por tanto sus efectos.
Si lo aplicamos en la piel logramos un efecto rejuvenecedor al estimularse
de manera natural la producción de fibras de colágeno y elásticas, logramos
una regeneración celular y revascularización de la zona tratada y una
remodelación de la epidermis y de la dermis.
Los efectos aparecen de manera progresiva con el paso de los días, ya que
los factores actúan estimulando el tejido. Para apreciar los resultados del
tratamiento en su totalidad son necesarios entre 1 y 2 meses.